Enfrentarse a un proyecto de reforma de una vivienda no es algo sencillo, ya que hay que tener muy en cuenta las necesidades de los habitantes y, donde factores como la funcionalidad de los espacios o la luz, son clave. Esto se acentúa, más aún, cuando debemos hacer frente a un proyecto de adaptación de viviendas para personas con movilidad reducida, cuya adecuación debe ir totalmente relacionada con las limitaciones funcionales de cada uno de los habitantes del hogar.
Atendiendo a la Ley 10/2014, de 3 de diciembre, de accesibilidad, así como a la Ley 8/2013 de rehabilitación, regeneración y renovación urbanas, en las reformas será necesario habilitar un entorno físico donde las personas con movilidad reducida y mayores de 70 años puedan moverse sin ningún obstáculo.
Por ello, en cualquier proyecto de adaptación de viviendas para personas con movilidad reducida habrá que tener en cuenta una serie de características comunes para garantizar la total movilidad y autonomía:
- Eliminación de barreras arquitectónicas.
- Adecuación y apertura de los espacios comunes (pasillos, puertas).
- Adaptación de los aseos.
Fases del proyecto de adaptación de viviendas para personas con movilidad reducida.
En OYRSA sabemos que cada proyecto es único. Por ello, en cada adaptación de viviendas para personas con movilidad reducida ponemos en marcha una serie de fases sucesivas que garantizarán las mejores soluciones a nuestros clientes:
- Escucha activa y evaluación de las necesidades del usuario.
- Análisis de las posibles soluciones y propuesta de opciones e ideas.
- Inicio de proyecto, con un seguimiento y una evaluación de las adaptaciones.
- Fin de obra y evaluación de resultados obtenidos.
En nuestros proyectos, planteamos siempre soluciones en total consonancia con la citada Ley 10/2014.
Soluciones para el exterior de las viviendas.
Por lo general, el principal problema que plantean los exteriores en las adaptaciones de viviendas son los desniveles que están presentes desde su construcción.
Para salvar este obstáculo, en cada adaptación de viviendas para personas con movilidad reducida construiremos rampas con las siguientes características:
- Tendrán una longitud de, como mínimo, 1m cuadrado en planta por cada 10 cm de desnivel que haya que salvar.
- Cuando no haya espacio suficiente entre los escalones, se construirá una plataforma elevadora.
- En última instancia, si las soluciones anteriores no fueran posibles, se instalarán orugas para las personas con movilidad reducida y sus acompañantes.
Soluciones para el interior de las viviendas.
Por norma general, en el interior de las viviendas se llevarán a cabo tres grandes soluciones que garantizarán la movilidad, la construcción de un ambiente adecuado y confortable y la seguridad. Además, en OYRSA tenemos muy en cuenta la adaptación de la cocina y de los baños, ya que son los dos lugares de las viviendas donde más peligro existe.
OYRSA y la adaptabilidad total de las viviendas.
Para permitir la movilidad de las personas con capacidades reducidas de movimiento, recomendamos seguir las siguientes especificaciones en cada adaptación de viviendas para personas con movilidad reducida:
- Puertas de, al menos, una anchura mínima de entre 70 y 80 cm de ancho. Se eliminarán las puertas de 60 cm.
- Instalación de agarraderos en las zonas más conflictivas para mantener el equilibrio.
- Pasillos en línea recta con un ancho superior a 90 cm, permitiendo que las sillas de ruedas maniobren con soltura.
- Instalación de suelos fijos y antideslizantes.
- Modificación de la altura de los enchufes e interruptores en función de las necesidades de la persona.
- Los muebles del hogar deberán disponer, en su frente, de una franja de espacio libre de más de 80 cm.
Accesibilidad de la cocina.
En la reforma de las cocinas de una adaptación de viviendas para personas con movilidad reducida, se deben cumplir los siguientes puntos:
- Espacio libre de, al menos, 1,20 m de ancho en la puerta de entrada, así como delante del fregadero.
- Suelos antideslizantes, tanto en seco como en húmedo.
- Llaves de paso adaptadas y de fácil bloqueo.
- Esquinas y bordes redondos para evitar golpes.
- Instalación de electrodomésticos de fácil manejo.
Accesibilidad del baño.
En estos espacios, realizaremos una adecuación de las alturas totalmente personalizas para cada cliente, midiendo la distancia entre la planta del pie descalzo y la curva de la rodilla. Un cuarto de baño adaptado a personas con movilidad reducida debe cumplir las siguientes condiciones:
- Espacio libre de, al menos, 1,20 m de ancho en la puerta de entrada para poder realizar giros. La puerta abrirá hacia afuera.
- Acceso totalmente frontal hacia el lavabo y accesos laterales hacia la ducha. El sanitario contará con una anchura mínima de 70 cm.
- Colocación de suelos antideslizantes.
- Todos los sanitarios deberán estar adosados a la pared. El lavabo será suspendido, dejando 65 cm libres, para permitir la colocación de la silla de ruedas.
- Instalación de la luz de modo uniforme para evitar sombras.
- Instalación de barras de apoyo en la ducha, bañera o resto de sanitarios.
Recuerda que el equipo de trabajo de OYRSA está formado por profesionales totalmente cualificados en distintos ámbitos: analistas, arquitectos, aparejadores, interioristas y obreros. Nuestros servicios y nuestra tecnología te garantizan el mejor servicio y una atención continuada durante el tiempo que dure la adaptación de viviendas para personas con movilidad reducida.
¿Necesitas asesoramiento personalizado? Ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos y acompañaremos durante todo el proceso.
OYRSA, profesionales en el ámbito de la construcción y reformas.